1.¿Qué solías hacer cuando ibas al colegio? ¿Y en casa?
-Estuve estudiando pero sólo hasta que me saqué el graduado escolar (me ponía a estudiar todas las noches después de pasarme todo el día cosiendo y ayudando en casa). Y en casa tenia que ayudar mucho ya que mi madre se murió cuando yo tenía 4 años.
2.¿Has llegado a estudiar? Durante tus estudios, ¿tuviste menos oportunidades que los chicos? ¿Cómo te trataban los profesores?
-No he llegado a estudiar ya que yo era de una familia de labradores y en mi casa estudiar era un símbolo de riqueza.La verdad, las mujeres siempre hemos tenido menos oportunidades que los hombres.
En las escuelas nos trataban a todas por igual, entre nosotras no hacían discriminación.
3.¿En qué has trabajado? ¿Encuentras diferencias entre la forma que traban a los hombres y a las mujeres en el trabajo? ¿Cuales?
-He trabajado cosiendo en un pequeño taller.
Sí. Los hombres aparte de que recibían el doble de dinero que las mujeres al llegar a casa ya no tenían nada más de que preocuparse, mientras que nosotras las mujeres al llegar de los talleres, las peluquerías, los bares... teníamos que ocuparnos de las tareas domésticas y de nuestros hijos e hijas.
4.Cuando te casaste, ¿era tu relación parecida a la de tus padres? ¿Qué consecuencias te produjo el matrimonio?
-No era exactamente igual, pero como ya llevábamos el modelo a seguir de nuestros padres (personas muy católicas) nos comportábamos más o menos de la misma manera que ellos.
Al casarme tuve que dejar de trabajar y mi obligación era estar pendiente de mi marido y de sus necesidades (tenía que tener las zapatillas preparadas al lado de la puerta cuando el se iba, la comida debía estar a la mesa a las dos en punto...).
5.¿Educaste a tus hijos como te habían educado a ti?
-Más o menos. Pero lo que sí que les pedía a mis hijos era que estudiaran lo máximo posible ya que ellos ahora tenían esa oportunidad y no tenían que trabajar a los 10 años. Yo los eduqué de manera católica pero cuando se hicieron mayores cada uno se dispersó un poco de los planes que yo había pensado para ellos pero lo tuve que aceptar y conformarme, alegrarme por la decisión que cada uno de ellos había tomado.
6.¿De qué forma afectó el cambio de la democracia a tu vida cotidiana? -La verdad es que me fue un cambió poco ya que yo al ya estar casada seguía el mismo comportamiento anterior.
7.¿Qué sentiste cuando se permitió que las mujeres participaran por primera vez en las votaciones?
-La verdad... es que no le di mucha importancia.
Testimoni recollit per Eliana Rabassa, 16/01/11